Aunque muchas veces se oye decir que la milenaria terapia de la acupuntura ayuda a tratar la infertilidad, especialmente la femenina, lo cierto es que no hay estudios científicos que avalen esta teoría sino todo lo contrario.

Tal es el caso de la investigación desarrollada por la Northwestern University, en Chicago, no encontró diferencias en el resultado de la FIV (fertilización In Vitro) en mujeres que acompañaron el tratamiento con sesiones de acupuntura y las que no lo hicieron.

En concreto, este estudio trató a la mitad de un grupo de mujeres que iban a someterse a la FIV con acupuntura, y a la otra mitad con un método placebo – colocando agujas en puntos que nada tienen que ver con la fertilidad –. El segundo grupo obtuvo una tasa incluso superior de embarazos tras seis semanas (53%), mientras que las que recibieron acupuntura se embarazaron en un 45% de los casos.

Una remota posibilidad es que la acupuntura tenga éxito aún si se utiliza en otros puntos y no los específicos de la fertilidad. En ese caso, los resultados del estudio han enmascarado este hecho. Por lo pronto, faltan datos para corroborar esto último.

Digamos entonces que aquella mujer que considere que la acupuntura la ayudará en su terapia de FIV, no debería estar impedida de recurrir a ella, pero científicamente no hay hechos que así lo confirmen.