TIENE PROBLEMAS DE INFERTILIDAD ENTRE EL 15 Y 17 POR CIENTO DE LA POBLACIÓN

CITLALLI LÓPEZ

El promedio de espera en la llegada de un bebé es de nueve meses. Los gemelos Ana y Julián, son dos casos especiales. La espera de ellos fue de tres años. Son bebés oaxaqueños de fecundación In Vitro.

Contra todos los dogmas religiosos que encierra el tema de la reproducción asistida, Luis y Mónica, padres de los gemelos In Vitro, lo decidieron sin temor y "en nuestro pleno derecho a ser padres".

Después de 8 años de matrimonio, diversos tratamientos de inseminación artificial y un intento fallido de adopción, recurrieron a una clínica especializada en fecundación, ubicada en la ciudad de México.

El proceso no fue sencillo ni rápido. Durante tres años Mónica y Luis fueron sometidos a exámenes y diferentes procesos de fecundación, pero también a emociones distintas que iban desde la alegría hasta la depresión porque muchos fueron los intentos sin éxito.

"Fue un procedimiento difícil porque en cada intento fallido nos desanimábamos", relata Mónica sujetando en sus brazos a la pequeña Ana de 9 meses de edad.

Pese a todo, Luis nunca perdió la esperanzas y convenció a Mónica de intentar una vez más. Era el sexto procedimiento. La técnica sería de alta complejidad: Fecundación In Vitro (FIV) con Inyección Citlpasmática del Espermatozoide (ICSI) que consiste en colocar directamente en el interior del óvulo (citoplasma) un sólo espermatozoide.

Además de eclosión asistida (hatching) que consiste en la realización de un pequeño orificio en la zona pelúcida (membrana externa del embrión) con la finalidad de facilitar la salida de la masa celular interna (MCI), cuando el embrión se encuentra en estado de blastocisto, para implantarse en el útero materno.

Esta combinación dio como resultado un embarazo gemelar para Mónica y Luis, quienes después de varios intentos se convirtieron en padres.

Su emoción es evidente. Los orgullosos padres no dudan ni un momento en afirmar que sus hijos fueron concebidos In Vitro, sin embargo, deciden guardar su identidad porque la carga religiosa sobre el tema, puede exponer a sus hijos a discriminación.

Rocío y Manuel, es otra de las parejas oaxaqueñas que decidió por la fecundación In Vitro. Recientemente iniciaron el proceso de reproducción asistida por el cual podrían pagarán más de ciento cincuenta mil pesos. Para el hombre de 35 años con problemas de infertilidad, el costo no será un impedimento porque, afirma, un hijo no tiene precio.

Se estima que en México, seis de cada diez parejas tiene problemas de infertilidad y en los últimos diez años se ha registrado un crecimiento del 20 por ciento, señala Jacobo Dabbah Mussaly, Director Médico de Embryos, clínica de reproducción asistida ubicada en la Ciudad de México.

El especialista, agrega que uno de los principales factores de la infertilidad es la postergación de la maternidad, enfermedades relacionadas con la fertilidad como la endometriosis, el consumo de sustancias nocivas (tabaquismo) y los cambios en la alimentación y estilo de vida.

Actualmente son seis parejas de oaxaqueños quienes se encuentra en tratamiento de fecundación asistida en la clínica Embryos, sin embargo hay una lista de 60 parejas más que han solicitado información para iniciar un tratamiento.

En México el ISSSTE es la única institución del sector público que efectúa estas técnicas de reproducción pero una vez que las parejas cumplen ciertos requisitos.

El médico Jacobo Dabbah Mussaly, agrega que el promedio de edad de gente que ha acudido a la clínica para una fecundación asistida, es de 40 años, aunque un 30 por ciento de los pacientes tienen una edad arriba de los 40 años, lo que representa un mayor reto.

Desde hace 15 años, agrega, el número de mujeres mayores a los 40 años, ha crecido de manera considerable. Lograr la fecundación no es imposible pero implica mayores consideraciones.

De visita por Oaxaca para reunirse con 60 parejas que son infértiles, Dabbah Mussaly explica que muchos son los factores que ocasionan la infertilidad entre ellos los problemas de cáncer, el retraso de la maternidad, factores ambientales, contaminación, exposición a toxinas, fármacos, plantas de energía, entre otros.

La Organización Mundial de la Salud (OMS) señala que la infertilidad es aquella incapacidad para lograr un embarazo, pero dependerá de la edad por la que curse: en mujeres por debajo de los 30 años hasta 2 años, en mujeres de 30 a 35 años 1 año y en mujeres arriba de los 35 años serán seis meses.

En un 40 por ciento de los casos la mujer es quien tiene alteración en su aparato reproductivo, y en un 60 por ciento los hombres.

La infertilidad afecta entre el 15 y 17 por ciento de la población en general y cada vez hay una mayor tendencia a incrementarse. Las estadísticas de Embryos refiere que 1 de cada 6 a 8 parejas, van a tener problemas de infertilidad con mayor o menor grado.

Se calcula que para el año 2020-2025, un 30 por ciento de la población en general tendrá problemas de infertilidad que consecuentemente arrastrará otras enfermedades directamente relacionadas.

Ante la demanda cada vez mayor de la fecundación asistida que hay muchas cuestiones éticas, religiosas y legales que resolver, en este último rubro los médicos y los legisladores están en la elaboración de una Ley Reproductiva.

Gestación en probeta

Los niños "de probeta" son aquellos fecundados artificialmente a través de una técnica llamada in vitro. El procedimiento consiste en extraer un óvulo de la mujer, y colocarlo en una probeta con los espermatozoides del hombre. Una vez que el óvulo está fecundado, se coloca en el útero de la madre, para que tenga un desarrollo normal y nazca en nueve meses.

La espera de sus gemelos fue de tres años, pero al final valió la pena.

Foto: CITLALI LÓPEZ