El embarazo es una especie de revolución. Cambia el cuerpo e irrumpen sentimientos y emociones. Muchas veces, especialmente para las mamás primerizas, esta "revolución" emocional puede resultar desconcertante: ¿Qué me está pasando? ¿Esto es normal? ¿No debería estar feliz, en lugar de estar asustada y hasta molesta?

En esta nota nos proponemos conocer más en profundidad los sentimientos y emociones que tienen lugar durante la gestación y así intentar dar alguna respuesta a estas preguntas.

Desde el inicio de la gestación, el cuerpo de la mujer experimenta transformaciones. Pero no sólo cambia el cuerpo: tratándose de una experiencia tan movilizante como la de engendrar vida, la afectividad se ve intensamente comprometida.

Según la Licenciada Adriana Penerini... "Las emociones que se manifiestan son diversas en cada caso. La singularidad de cada mujer se expresa con más fuerza en torno a esta experiencia nueva, ya que cada embarazo es de alguna forma una primera vez. Los sentimientos pueden ser encontrados, no necesariamente positivos. Hay que tener en cuenta cómo se llegó a ese embarazo y en qué situación está cada mujer." 

Cronología de las emociones 

La Lic. Penerini identifica algunas emociones propias de cada trimestre:
"En el primer trimestre predominan la sorpresa, la emoción. Paralelamente, algunos malestares físicos pueden interferir en el estado de ánimo. Suelen aparecer temores con respecto a la permanencia de la gestación. Por eso, muchas eligen no comunicar su estado antes de estar seguras de que todo está en orden. Es común que se repliegue el deseo sexual y que se esté con ganas de llorar o más sensibles. Hay cansancio y un cierto desinterés por cualquier otro tema que no se relacione con la gestación.

En el segundo trimestre se recupera el buen estado físico. Aparece la ansiedad por "sentir al bebé". Se afianza la relación con el obstetra y se está con más energías. Puede surgir temor por la normalidad del bebé. La embarazada se acerca más a la pareja, retoma más intensamente la sexualidad. Comienza a conectarse con el proyecto en sí, planea mudanzas, elección de ropita, mobiliario, etc. El estado de ánimo es más estable. Hay alguna preocupación por el peso y por el cuidado del cuerpo".

Según la Lic. Valeria Starowlansky " ...En el 2° trimestre no están las molestias físicas, pero tampoco se perciben mucho los movimientos del bebé: "Sé que estoy embarazada pero no me siento así...". Esto trae angustia y al mismo hay una conexión mayor con el cuerpo, ya que uno está alerta a todas las sensaciones. Algunas embarazadas comienzan a sentir más incomodidad, a verse más torpes; otras se sienten más sexys y lindas".

"Durante el tercer trimestre - continúa la Lic. Penerini - la panza y el bebé tienen una entidad más palpable.