El tratamiento se incrementó alrededor de un 40% en los últimos años. Según especialistas, la causa es que se dilató la edad a la que las mujeres deciden ser madres, factor que reduce las tasas de embarazo. Además, indican que el uso de técnicas de fertilización asistida crece año tras año en el país y la provincia

La diversificación de las técnicas de fertilización asistida sumada a los cambios culturales de los últimos tiempos han provocado un creciente uso de estos tratamientos por parte de las parejas que no pueden lograr un embarazo de manera natural. En ese contexto, los especialistas detectan que cada vez son más los pacientes que recurren a la donación de óvulos, un fenómeno causado principalmente por la decisión de las mujeres de postergar la maternidad debido a cuestiones laborales.

La fertilización asistida incluye una importante diversidad de tratamientos médicos en la actualidad. Estas técnicas se aplican según la necesidad de cada pareja, un factor variable en la sociedad actual teniendo en cuenta la existencia de un modelo cada día más amplio y flexible de familia.

De cualquier manera, en la mayoría de los casos la asistencia responde a problemas de infertilidad en hombres y mujeres, un problema que afecta a alrededor de un 15% de las parejas en edad reproductiva.

El médico cordobés especialista en la temática Natalio Kuperman y el presidente del Comité Científico de la Sociedad Argentina de Medicina Reproductiva (Samer), Marcos Horton, coinciden en señalar que la donación de óvulos es el tratamiento que más ha aumentado en los últimos años.

Según indicó el profesional cordobés, quien también atiende en nuestra ciudad, mediante este proceso la mujer que desea lograr un embarazo recibe óvulos de una donante, que luego son fertilizados con el semen de su pareja. El tratamiento se realiza en pacientes que tienen una baja respuesta ovulatoria, en los casos de menopausia precoz y en aquellas que han sido sometidas a quimioterapia.

Se calcula que la cantidad de parejas que recurre a la ovodonación para tener hijos se ha incrementado en alrededor de un 40% en los últimos años. Los especialistas señalan que la principal causa de este fenómeno se relaciona con que las mujeres han dilatado la edad en la que deciden ser madres y, por lo tanto, cuando buscan quedar embarazadas su nivel de fertilidad es menor.

Fertilidad

La fertilización asistida consiste en ayudar a la unión entre un óvulo y un espermatozoide para la formación de un embrión y, posteriormente, de un bebé cuando el embarazo no ocurre naturalmente.

Esta problemática afecta a un porcentaje importante de la población. Según informaron desde Samer, una de cada seis parejas padece infertilidad. Kuperman, en tanto, indicó que en un 30% de los casos de esterilidad las causas son masculinas, en otro 30% son femeninas y el 40% restante son mixtas. 

Aunque la mayoría de las parejas que padecen infertilidad pueden resolver el problema mediante tratamientos de escasa complejidad, el médico cordobés indicó que “cada día son más los pacientes que recurren a técnicas de fertilización asistida y cada día son mayores las soluciones que brindan”. 

“El hombre puede tener problemas en cantidad y/o calidad de sus espermatozoides y la mujer puede tener problemas a nivel de sus trompas, de la calidad del útero, problemas con su ovulación y todo eso se puede solucionar con las técnicas de fertilización in vitro. Después están las técnicas de baja complejidad, como la inseminación intrauterina”, dijo el médico.

En tanto, el representante de la Samer destacó que la fertilización in vitro es la técnica de alta complejidad más usada actualmente. E informó que anualmente en Argentina se realizan 10 mil tratamientos de este tipo, aunque aclaró que varios de ellos pueden ser distintos intentos de una misma pareja. 

Horton explicó que a través de la fertilización in vitro, luego de un proceso de estimulación, los óvulos de la mujer se fertilizan fuera del cuerpo, en laboratorio, con los espermatozoides de su pareja. Posteriormente, los óvulos fecundados se colocan dentro del útero de la paciente y se esperan los resultados. 

El médico indicó que con este tratamiento se busca obtener una cantidad mayor de óvulos que la que se produce naturalmente, dado que una mujer libera un solo óvulo por mes. 

“La fertilidad humana es relativamente baja y en cada ciclo la mujer tiene una índice que varía entre un 5 y un 25 % de probabilidad de embarazo”, advirtió Horton. Y añadió que en esta situación intervienen no sólo la calidad de los óvulos sino también variables como la fertilidad del hombre, la edad de la mujer o la actividad sexual de la pareja.

En tanto, dentro de las técnicas de fertilización asistida de baja complejidad, Kuperman señaló que la más aplicada es la inseminación intrauterina: “Consiste en ubicar el semen del hombre, una vez seleccionados los espermatozoides, dentro del útero cuando la mujer está ovulando. Esto se hace en el consultorio, en cinco minutos, y no tiene muchos costos”. 

La ovodonación

Ambos especialistas coinciden en que la donación de óvulos es la técnica que más se ha incrementado en el ámbito de la salud reproductiva. La práctica consiste en una fertilizacion in vitro, a través del procedimiento descripto, pero utilizando óvulos de una mujer donante en lugar de aquellos propios de la paciente que engendrará al embrión.

Según datos brindados por Kuperman, en Argentina se realizan alrededor de 6.000 tratamientos de este tipo anualmente. A su vez, la ovodonación -como se denomina a esta técnica- representa alrededor de un 30% del total de tratamientos por fertilización asistida. 

En relación a las causas de este fenómeno, Horton expresó: “Los resultados de la fertilización in vitro dependen principalmente de la edad de la mujer y la situación social actual, aquí y en el resto del mundo; es que la mujer difiere su maternidad por motivos profesionales y cuando decide tener hijos su fertilidad está biológicamente disminuida”.

El integrante de Samer subrayó que a medida que avanza la edad de la mujer, disminuyen las tasas de embarazo. Y añadió que especialmente en las pacientes mayores de 35 años se observa un importante descenso en la cantidad y calidad de sus óvulos.

En tanto, el médico cordobés destacó que a nivel provincial la donación de óvulos se ha vuelto muy frecuente en los últimos dos años. Y agregó que esta técnica se aplica sobre todo en pacientes que sufren una menopausia precoz y en aquellas que debieron hacer quimioterapia a causa de un cáncer y vieron afectada su fertilidad.
Kuperman destacó que la donación de semen también se está usando con frecuencia, práctica que también suele responder a la pérdida de fertilidad en hombres que sufrieron un tratamiento oncológico. 

Para estos últimos casos, existen bancos de semen en el país que envían muestras congeladas a aquellos centros que lo soliciten, además de brindar ciertas características del donante. Sin embargo, Horton informó que la acumulación de óvulos en un banco presenta muchas más dificultades en comparación con los espermatozoides, debido a las características de estas células. 

“Recién hace unos años estamos usando la técnica de congelamiento de óvulos” dijo el especialista pero agregó que no existen bancos de este tipo en Argentina. “Por lo tanto, para los tratamientos de donación de óvulos se tiene que estimular a una donante al mismo tiempo que se prepara a la mujer receptora”, relató.